BUSCANDO NUEVOS SABORES
¿Cansado de riojas y riberas? ¿Has probado ya los verdejos y albariños más punteros de la última cosecha? ¿Te mueres por sacar a la mesa un vino que no conozcan tus amigos o que, cuando menos, consiga sorprenderles? Sin querer alcanzar la perfección, os proponemos una lista de vinos distintos y, en algunos casos, tremendamente originales que pueden resucitar en un momento la pasión vinícola. Una lista, por otro lado, pensada para iniciados que tengan la mente abierta a “nuevos sabores”.
Tintos
Delicioso ensamblaje navarro. Un perfecto ejemplo de armonía y equilibrio.
Ars Nova 2004, que firma Compañía Vitivinícola Tandem, es un tinto impecable y de cuidada elaboración que combina tempranillo (56%), cabernet (17%) y merlot (27%). Con un paso por madera de seis meses, tiene una nariz muy fina con abundante fruta roja, mentolados y notas especiadas. En boca es muy sabroso y aromático (balsámico) y con buena persistencia. En el entorno de los 10 €, dice mucho a favor de esta novísima bodega navarra fundada en 2003.
Garnacha modélica de Aragón. Campo de Borja ha sido una de las grandes revelaciones de los últimos tiempos gracias a sus garnachas de cepas viejas que ofrecen sabores concentrados y profundos.
Tres Picos 2004 es uno de los mejores exponentes de la zona. Un tinto en clave aromática, con abundantes balsámicos, notas de monte bajo y la sabrosidad característica que aporta la variedad. Amplio, envolvente, con taninos pulidos y un largo final aromático. Con gran personalidad y madera apenas perceptible y perfectamente ensamblada. También sobre los 10 €.
Pizarra de Cebreros. Un exótico tinto de Ávila que elabora Telmo Rodríguez para el corredor de rallies Carlos Sainz.
Pegaso Barrancos de Pizarra 2003 es también una garnacha de viñas viejas pero que, en este caso, ofrece la originalidad de un paisaje recóndito marcado por la impronta de sus suelos pizarrosos. Frutos negros maduros, fondo mineral, balsámicos, cedro, regaliz, finas maderas. Boca sabroso, terroso, goloso, excelente madurez, concentrado y con peso de fruta. Carnoso, amplio y con un final mineral que le da un toque único y distintivo. Un vino para aquellos que les gusta ver reflejado un paisaje en la copa. En el entorno de los 25 €.
El mejor exotismo canario: un jardín de aromas.
Cráter 2004. Finas notas balsámicas de bosque atlántico (hojarasca, eucalipto), especias dulces y elegantes tostados. Boca sabroso, sutil, con taninos pulidos y agradable madurez; frutillos rojos, muy balsámico y final con personal carácter terroso, el sello de los suelos volcánicos de los que procede. Una propuesta tremendamente original y muy, muy diferente. También entre 25 y 30 euros.
Blancos
El vino de las mil variedades. Lleva chardonnay, garnacha blanca, moscatel, sauvignon blanc, viognier y otras no desveladas. Lo más sorprendente de todo es que es un rioja, elaborado por una de las escasas bodegas tipo chàteau de la denominación (Remelluri).
Este Remelluri 2004 Blanco es una joya exótica y fragante que sigue siendo uno de los secretos mejor guardados de Rioja y constituye una sorpresa permanente. Muy sutil en nariz, con aromas de fruta de hueso y finas maderas, complejo. Cremoso y sabroso en boca, muy equilibrado, con viva acidez. Final ahumado y de fruta madura. Una delicia. Entre 25 y 30 €.
El “moscatel” más fresco. Ochoa fue pionero en elaborar un moscatel dulce en versión fresca y fragante.
Su Ochoa Moscatel 2004 sigue marcando el camino para este tipo de vinos: fino y muy fresco en nariz, con notas cítricas y de fruta escarchada y fondo de eucalipto. Muy untuoso y envolvente en boca, pero con excelente acidez que le hace tremendamente fresco y vibrante (agradable sensación cítrica); muy sabroso y largo. Nadie podrá resistirse a una segunda copa. En el entorno de los 10 € la botella de 50 cl.
Tintos
Delicioso ensamblaje navarro. Un perfecto ejemplo de armonía y equilibrio.
Ars Nova 2004, que firma Compañía Vitivinícola Tandem, es un tinto impecable y de cuidada elaboración que combina tempranillo (56%), cabernet (17%) y merlot (27%). Con un paso por madera de seis meses, tiene una nariz muy fina con abundante fruta roja, mentolados y notas especiadas. En boca es muy sabroso y aromático (balsámico) y con buena persistencia. En el entorno de los 10 €, dice mucho a favor de esta novísima bodega navarra fundada en 2003.
Garnacha modélica de Aragón. Campo de Borja ha sido una de las grandes revelaciones de los últimos tiempos gracias a sus garnachas de cepas viejas que ofrecen sabores concentrados y profundos.
Tres Picos 2004 es uno de los mejores exponentes de la zona. Un tinto en clave aromática, con abundantes balsámicos, notas de monte bajo y la sabrosidad característica que aporta la variedad. Amplio, envolvente, con taninos pulidos y un largo final aromático. Con gran personalidad y madera apenas perceptible y perfectamente ensamblada. También sobre los 10 €.
Pizarra de Cebreros. Un exótico tinto de Ávila que elabora Telmo Rodríguez para el corredor de rallies Carlos Sainz.
Pegaso Barrancos de Pizarra 2003 es también una garnacha de viñas viejas pero que, en este caso, ofrece la originalidad de un paisaje recóndito marcado por la impronta de sus suelos pizarrosos. Frutos negros maduros, fondo mineral, balsámicos, cedro, regaliz, finas maderas. Boca sabroso, terroso, goloso, excelente madurez, concentrado y con peso de fruta. Carnoso, amplio y con un final mineral que le da un toque único y distintivo. Un vino para aquellos que les gusta ver reflejado un paisaje en la copa. En el entorno de los 25 €.
El mejor exotismo canario: un jardín de aromas.
Cráter 2004. Finas notas balsámicas de bosque atlántico (hojarasca, eucalipto), especias dulces y elegantes tostados. Boca sabroso, sutil, con taninos pulidos y agradable madurez; frutillos rojos, muy balsámico y final con personal carácter terroso, el sello de los suelos volcánicos de los que procede. Una propuesta tremendamente original y muy, muy diferente. También entre 25 y 30 euros.
Blancos
El vino de las mil variedades. Lleva chardonnay, garnacha blanca, moscatel, sauvignon blanc, viognier y otras no desveladas. Lo más sorprendente de todo es que es un rioja, elaborado por una de las escasas bodegas tipo chàteau de la denominación (Remelluri).
Este Remelluri 2004 Blanco es una joya exótica y fragante que sigue siendo uno de los secretos mejor guardados de Rioja y constituye una sorpresa permanente. Muy sutil en nariz, con aromas de fruta de hueso y finas maderas, complejo. Cremoso y sabroso en boca, muy equilibrado, con viva acidez. Final ahumado y de fruta madura. Una delicia. Entre 25 y 30 €.
El “moscatel” más fresco. Ochoa fue pionero en elaborar un moscatel dulce en versión fresca y fragante.
Su Ochoa Moscatel 2004 sigue marcando el camino para este tipo de vinos: fino y muy fresco en nariz, con notas cítricas y de fruta escarchada y fondo de eucalipto. Muy untuoso y envolvente en boca, pero con excelente acidez que le hace tremendamente fresco y vibrante (agradable sensación cítrica); muy sabroso y largo. Nadie podrá resistirse a una segunda copa. En el entorno de los 10 € la botella de 50 cl.
1 comentario:
Respecto al moscatel de grano menudo de Ochoa, he probado las diferentes versiones y me quedo con el "vendimia seleccionada" pero por 20 eurazos¡¡¡
También en Navarra, la bodega Marques de Montecierzo elabora un más que correcto moscatel y más económico.
saludos Rafa.
bye Miriam
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